| La conversación se iba dando como entre dos amigas que se  conocían desde hace mucho tiempo, la familiaridad con la que Shri Mataji me  trataba me hacia sentir como en casa. 
                                Comenzamos a ordenar su valija, observaba  en silencio cómo lo hacíamos y nos lo agradeció. Le consulte sobre el nacimiento de mi bebé y me aconsejó que no  pensara, que todo iba a ser claro en su momento. Antes de retirarme de su  habitación me pidió que le diera una 
                                medicina en la boca, se la di con tanto  amor, me sonrió y agradeció, quedé en silencio y luego nos pidió que nos  retiráramos.  He vivido varias experiencias en Sahaja Yoga, esa vez fue la  primera vez que la sentí tan cerca, y sin embargo nuestra familiaridad y amistad  quedaron en mi selladas para 
                                siempre. Siempre que necesité de Shri Mataji la  sentí y viví verdaderamente cerca, una conmigo, jamas me separé de Ella, de la  verdad de Sahaja Yoga, su amor hacia sus hijos es una realidad que a 
                                todos  muestra la sinceridad de su afecto, cuidando y compañía en este gran viaje de  crecimiento y evolución espiritual. |